Estamos destinados a hacerlo, a sentirlo, a desearlo… con locura. La primera vez que lo vi supe que era la respuesta… mis ojos no miraban otro cuerpo sino el suyo, y el sin conocerme aun, me miraba y me tocaba con su mirada. Si el destino no fuera tan cruel seria para ti, lo que eres para mi… quisiera sentirte en mi vida, en mi corazón.
Es la atracción fatal de un cuento de hadas... Nuestros cuerpos no responden solo se acercan sin poder evitarlo, nuestras miradas se cruzan sin quererlo, pero todo se desvanece por las vanidades del mundo, sabemos que algún día de estos sucumbiremos al deseo del cuerpo y sin desearlo nos amaremos…mas apasionadamente que dos enamorados.
Podía leer sus pensamientos por la mirada de su rostro, por sus deseosas caricias que de sus manos se adivinaban, por sus labios que me besaban suave y lentamente recorriendo el interior de mi boca, chupando, probando… hasta llenarme de su amor...
En realidad no conocía sus intenciones solo sentía la pasión corriéndonos, el deseo de hacer mas, de demostrarle lo que sentía, le agradezco liberarme, ayudarme en mi señal de decadencia. Después de la experiencia me sentía una persona integrada al mundo, algo se despertó dentro de mí, algo surgía, algo que me gustaba….algo que no reconozco.
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